20-03-2021: No hay dos sin tres

 

No os lo vais a creer: me han vuelto a atropellar.

Esta vez salido ileso, pero la historia es tan rocambolesca que os la voy a resumir. Más o menos.

Las probabilidades de que sucediera algo así eran ridículamente remotas; llevo un mes casi sin salir de casa, precisamente por la costilla que el anterior accidente me hizo picadillo. De hecho, volvía de comprar un medicamento que me habían recetado para calmar el dolor costal y me dirigía al veterinario para tratar la alergia de mi perra, Sirka, así que la llevaba conmigo en la moto.

Hallábame ya bien entrado en un paso de cebra con semáforo en verde para peatones y ámbar para los coches, cuando veo que se aproxima un enorme SUV con aviesas intenciones y a una velocidad anormalmente elevada. En un alarde de capacidad intuitiva, sospeché que no tenía intención de pararse. Y en otro alarde de sentido común, imaginé que en una colisión de un vehículo semiblindado de casi dos mil kilos con una silla de ruedas ultra-ligera con un motor eléctrico acoplado, cuatro hierrajos, un tetrapléjico mal alimentado y una perra de 8 kilos, no seríamos nosotros los que saliéramos mejor parados.

Frené de inmediato y giré bruscamente para minimizar el contacto. Afortunadamente iba despacio, así que cuando se produjo la esperada colisión, ésta no fue muy fuerte. Sirka y yo nos llevamos un pequeño golpe, la moto apenas sufrió —y luego pude arreglarla fácilmente—, pero estuvimos a puntito de volcar. Y el susto de ver cómo se te viene encima esa monstruosidad no te lo quita nadie, vaya.

Los nuevos SUV

Efectivamente, cada vez se parecen más a tanques

No me explico cómo la conductora no me vio. La visibilidad era perfecta y cuando tomó la curva yo ya había entrado en el cruce. No sé si la enorme altura de esos cacharros mastodónticos dificulta la visión, si el hallarse al volante de semejante vehículo te hace creerte dueño supremo de la vía pública (y el resto del universo conocido) y te otorga prioridad en los cruces, o si simplemente se distrajo. Supongo que habrá sido esto último, pero es que no puedes permitirte semejante distracción cuando estás desplazando más de una tonelada y media: puedes matar a alguien.

Y ahora es cuando viene lo mejor de todo: la conductora frenó para contemplar el resultado de su fechoría, aceleró inmediatamente y se largó como alma que lleva el diablo. Afortunadamente, no todo el mundo es tan desgraciado como aquella señora: los otros conductores que venían detrás se pararon para ver si me encontraba bien. Es reconfortante saber que queda algo de humanidad en el mundo.

No sé qué motivó esa decisión. Quizás no tenía seguro, o puede que ni carnet de conducir; o quizás pensó aquello de «si no veo el problema, no existe». Pero… ¿un atropello con fuga en pleno centro de la ciudad? Si hubiera montado una más gorda, no habría podido llegar muy lejos. Además de no tener corazón, tampoco demostró poseer mucha inteligencia. Pero de poco te vale la matrícula de una desalmada si no se han producido daños. En cualquier caso, señora conductora, si estás leyendo esto, te perdono: bastante tienes ya con ser tan hija de puta.

 

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6 comentarios

  1. Pero es posible? Hay que reconocer que has tenido unos reflejos extraordinarios para conseguir esquivar un vehículo de esas características, que con un golpe, que te hubiera dado… habría sido terrible. Y una vez más, nos lo cuentas con ese buen ánimo, que parece que no haya sido tan grave, pero tuviste que pasar un momento al límite, y gracias a Dios, no te pasó nada grave, pero , llegar a caer, y ver que la conductora se marchaba…te parecería increíble. Es una falta muy grave que se debería denunciar. Menos mal que estás bien, y que había buena gente cerca. Espero que puedas seguir saliendo con confianza, y que no vuelvas a tener ningún percance. Un abrazo muy fuerte y cuídate mucho!

    1. La verdad es que en el momento sí que me llevé un buen susto al ver que se me venía encima ese «coche» tan grande. Que enseguida se convirtió en cabreo y rabia cuando vi que se largaba.
      Pasadas unas horas decidí trivializar el asunto. No gano nada enfadándome, solo frustración.

  2. Qué barbaridad!!
    Qué bestialidad !!
    Es increíble!!
    Parece mentira!!
    No me lo puedo creer!!
    Vaya susto!!
    Qué suerte salir ileso!!
    Que hija de puta la conducta!!
    Que tía más bestia ( la conductora)!!
    Que personas circulan por el mundo!!
    Habría que poner un artículo al periódico!!
    No pueden andar suelta ese tipo de asesina en potencia!!
    Hay que denunciar!!
    Ojalá alguien que vio el suceso lo denuncie!!

    Querido Miguel siento el gran susto y el peligro al que has estado expuesto .
    Tienes un ángel De la guarda muy atento y que te quiere con locura , esa es la explicación que encuentro a que puedas salir ileso de tu tercer atropello!!
    Me alegra infinito que no estés herido pues un coche/tanque de esas dimensiones te hubiera dejado muy malherido!!
    Ufff , menos mal que tienes muchos reflejos!!
    Mucho ánimo y mucho cuidado , que ya sé que tienes y lo estás demostrando!!
    Un abrazo muy fuerte

    1. Gracias, Pilar. No sé lo que me habría pasado, era un coche muy grande, pero tampoco iba rápido.
      Quise salir detrás de ella para al menos tomar nota de la matrícula, pero con el golpe, la moto se me había desajustado.
      Luego, ya en frío, me alegro de no haberlo hecho, porque al no haberse producido daños, no creo que haya nada sancionable.

    1. No entiendo tu razonamiento. ¿Como me atropellan tres veces soy un peligro público?
      Para tu tranquilidad, en las dos primeras ocasiones, el conductor admitió su culpa; la tercera se dio a la fuga.
      ¿Me puedes explicar lo que quieres decir?

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