2020-01-07: ¡Feliz año!

Malos hábitos

Vuelvo a dar una oportunidad a este blog. Dejé de escribir por varias razones. Confieso que una de ellas es la vagancia. Escribir lleva su tiempo; o al menos yo tardo en redactar para que quede a mi gusto. Y como el tiempo de actividad diaria de que dispongo es limitado, prefiero dedicarlo a otros menesteres.

Sin embargo, el motivo principal es que pretendía narrar una historia de superación de problemas; una historia de un nuevo comienzo, de adaptación a unos límites. Pero dichos límites se han multiplicado y lo que pretendía ser una historia feliz se ha convertido en otra triste, de contratiempos. Nunca me han gustado los dramas, y menos aún narrar los que sufro en primera persona.

Van pasando los meses y mi vida no avanza en la medida que yo esperaba. Ni siquiera va bien encaminada. No solo no he alcanzado los objetivos que me puse al salir del Hospital de Parapléjicos de Toledo, sino que mi estado de salud ha empeorado bastante y no tiene visos de mejorar. Mi principal enemigo sigue siendo el dolor, pero durante mi ausencia en el blog no han dejado de acosarme los problemas. El último, del que todavía no me he recuperado del todo, es una «misteriosa» enfermedad desconocida que me ha estado visitando durante el último mes.

Sección sobre mi estado de salud

Es muy difícil medir la evolución de un dolor cuando lo sufres constantemente, cuya intensidad depende del día, cuando el tratamiento cambia cada dos por tres… Es un dolor que no debería existir, que afecta a una zona del cuerpo en la que no tengo sensibilidad. Sin embargo, sé que estoy peor, porque recuerdo cosas que antes podía hacer y ahora no: decidí adoptar a mi perra Sirka porque era capaz de sacarla varias veces al día, y recuerdo que no me suponía un esfuerzo enorme. Ahora es algo que solo puedo hacer en mis mejores días.

He tenido un bajón muy fuerte a nivel moral, por diversos factores. Quizás no se note, porque procuro no pagarlo con la gente que me rodea; nadie tiene la culpa de lo que me pasa y no quiero ser una carga, de ningún tipo. Además, a mí tampoco me conviene sumergirme en esos dramas: intento olvidar mis problemas cuando estoy con alguien para disfrutar de su compañía y que disfruten de la mía. Sin embargo, no siempre lo consigo.

La pandemia de coronavirus también me ha afectado, como a todos. Estoy siendo muy cuidadoso y me he sometido a un aislamiento casi total. Seguro que por un lado, lo he llevado mejor que la mayoría, ya que estoy más acostumbrado a la soledad, pero por otra parte ser lesionado medular en silla de ruedas también supone una carga adicional.

Creo que debo meditar profundamente lo que es y lo que debería ser mi vida. Es posible que no haya elegido el camino correcto. Llevo casi cuatro años así, pero mi vida aún está lejos de ser estable y sigo sin saber lo que debo hacer. Intuyo que algo debe cambiar, pero no sé bien qué. Para mí, esto sigue siendo nuevo, así que acepto consejos. Lo que busco son soluciones a largo plazo.

Malos hábitos

Cambiar los malos por nuevos hábitos es un camino cuesta arriba. Pero arriba se está mejor que abajo.

Pero no todo es negativo. Me he despedido de las infecciones de orina. En realidad, las sigo sufriendo: veo salir la acumulación de bacterias y en las tiras reactivas los marcadores de infección se salen de la escala. También noto que me afecta: aumentan los dolores, el malestar… Pero mi cuerpo ha aprendido a luchar contra ellos, ya no me provocan fiebre, necesito tomar menos antibióticos y no tengo que ingresar en el hospital cada mes y medio. Tal como están las cosas —en plena pandemia—, supone un gran alivio.

También me he recuperado totalmente de la parálisis del brazo derecho que sufrí a principios de año. Aquello fue un susto gordo. De vez en cuando, sí sufro parálisis parciales en el mismo brazo, de las que me recupero en unas horas. Los médicos no han sabido determinar la causa, pero yo tengo mi teoría de profano en la materia que ya os contaré.

Y creo que la mejor noticia es que a pesar de todo, no me he rendido. Como buen tetraterco, sigo luchando para conseguir mis objetivos; el más importante de todos es lograr la mayor independencia posible. Pero sobre todo, mantengo ilusión por vivir y disfrutar de la vida.

Os seguiré contando… Espero. Mientras tanto, muchas gracias por vuestra presencia y vuestro apoyo; en los momentos más difíciles es muy reconfortante.

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8 comentarios

  1. Bien miguel !! Me ha gustado mucho volver a leerte ! Ojalá vayas mejorando con el paso del tiempo. Sin duda el buen ánimo te ayudará a ello. Un fuerte abrazo 🤗!!

  2. Me alegro mucho de que vuelvas a escribir y lo que nos cuentas… es lo que sientes y te entendemos perfectamente, y valoramos tu capacidad para aceptar las cosas que se han ido complicando, y más aún ese buen ánimo que quieres seguir teniendo a pesar de todo, y yo, como amiga, te aseguro que nos has hecho disfrutar de los encuentros contigo, que ahora no podemos tener, y también echamos de menos y deseamos que algún día podamos volver a tener. A ver si esos dolores y esas molestias inexplicables ceden, y puedes volver a salir con Sirka, como antes. Un abrazo muy fuerte y cuídate mucho.

  3. Sigue escribiendo, seguro que te viene bien y a los demás nos encanta leerte. Nunca te rindas eres el mejor. Mucho ánimo y paciencia.

  4. Hola Miguel
    Me acabo de enterar que habías escrito y he ido corriendo a leerte. Es una buena noticia que reanudes tu blog porque sigues siendo un ejemplo de superación y esfuerzo .
    Confía en que aunque no hayas conseguido todas las metas propuestas , seguro que llegará un día en que todos los esfuerzos que estás haciendo darán la cara y podrás ver que han merecido la pena !!
    Estoy segura de ello, muchas veces en las enfermedades los tiempos de recuperación no los ponemos nosotros , sino que es el cuerpo el que va evolucionando y a veces no tan rápidamente como nuestra voluntad quisiera pero no dudes de que todo esfuerzo tiene su recompensa .
    Y de hecho como tú mismo reconoces ya has obtenido alguna mejoría …
    Me atrevo a aconsejarte que debes potenciar tu mente que por lo bien que te expresas es una mente privilegiada y te invito a que busques algún curso por internet para que por medio de la relajación obtener mejorar tu estado físico y sobre todo el dolor.
    Te felicito por seguir manteniendo la ilusión por vivir y disfrutar de la vida!!
    Tienes muchas cosas buenas para ser feliz y muchas persona que te queremos
    Un abrazo enorme y mucho ánimo

    1. Sigo luchando, pero cada vez con menos ganas. Empiezo a pensar que llegado un punto, uno debe asumir que el resto de su vida va a ser así y adaptarse a las nuevas circunstancias. Está bien tener metas y propósitos, pero han de ser realistas, porque al final vivimos de la realidad, no de sueños.
      Soy demasiado nervioso e inquieto y creo que por eso nunca se me ha dado bien al meditación. De todas formas, creo que mis problemas son físicos, no mentales.

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